Al abordaje nomás

* Colo Colo vs Ñublense fue un partido copero. Tenso, difícil para el local, mezquino de parte de la visita. Pero la Longa hizo su negocio, es legítimo defender con dos líneas. Sacó una ventaja breve, pero la ventaja al fin y al cabo es una diferencia enorme. ¿La vuelta? Fernando Astengo tiene que definirse para la ocasión: va a usar línea de 3 (con los carrileros jugando al medio) o con línea de 4 (con los carrileros más atrás). Ñublense es como una amiga mía: por el medio del campo a NO SE LE PUEDE ENTRAR. ¿Pruebas? La única vez que algo de peligro llevó el Cacique al arco sureño fue con un centro de Rubio y un pivoteo de Lucas que el Grillo recibio offside. Todo el resto fue machacar, patear de afuera y aferrarse a las pelotas paradas. O sea, nulo.

* Universidad de Ch. vs Everton nos confirmó tres impresiones que teníamos con anterioridad. Lo primero, el Pelao Acosta es un viejo astuto que jamás está tan cómodo como al contragolpe, jugando de chico a grande y motivando al jugador a punta de chuchadas lacrimógenas. Lo segundo, el equipo de Federico Valdés es perfectamente irregular, y como tal depende de rendimientos individuales más que del trabajo del DT (vaya paradoja en un equipo de Salah). Y lo tercero, que los hinchas del chuncho están afilando los cuchillos en caso de quedar fuera. Desde mi casa se escuchaban las pifias.

Pero, aunque me molesta concederlo, en ambas llaves falta la vuelta. Es temprano para vaticinar. Los partidos de vuelta deberían ser muy diferentes (disposición ofensiva de la visita, recaudos en los equipos locales). Los resultados están en suspenso, por lo mismo se reciben apuestas hasta el 21 de mayo a mediodía.